lunes, 18 de enero de 2010

Le veo. Se dilatan mis pupilas. Me río. Sería gracioso decir que no es lo único que se me dilata en este momento.
Pienso fríamente en quien lee esto. Hace tiempo que perdió el anonimato. Empieza el desencanto. Nunca fui encantadora, ni pretendí serlo. Soy molesta, una mosca cojonera dando por culo.
Decadencia nocturna. Insalubridad diurna. Juegos de palabras no aptos para menores de dieciocho, ni para más de dos jugadores. En mi cabeza.
Si todo lo controlan los putos relojes, no sé donde acaba la obligación y empieza el pasarlo bien. Le faltan horas a la noche. Me sobra enero y necesito un par de julios.
Enloquecer en un concierto. Quitarme la ropa. Rock and ron. Algo de lo de siempre.
Me estoy haciendo vieja. Maldita sea.

3 comentarios:

  1. http://www.youtube.com/watch?v=zRdyDSbWg7w&feature=related

    ResponderEliminar
  2. mientras siga destilando sangre esa punta que en vez de negra es roja
    que nos quede tu velvet y el underground de alguien que sigue sin dar ese paso, siguiente...

    ResponderEliminar