Mirándote.
Verte con ojos de desgana.
Fúnebres pestañas acariciándote en una mirada.
Rodeada por un manto oscuro,
que tejo en noches sin luna.
Llenas de incondenables asesinos silenciosos.
Espirituosos contra un espíritu cansado.
Más batallas perdidas.
Giros sin retroceso.
Ángulos completos en el tiempo.
Imparable.
Biorritmos emancipados.
Vidas a su lado mientras duren.
Duelen, sienten, huyen.
Y mañana será otra noche.
domingo, 17 de mayo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario